La Comisión Intereclesial de Justicia y Paz informó que en la mañana del 20 de enero apareció flotando el cuerpo sin vida de una persona en el bajo San Juan, en jurisdicción del municipio de Litoral de San Juan, cerca del Resguardo indígena de Puerto Pizario. El cuerpo tenía tres orificios de arma de fuego, uno en la cabeza, otro en la nuca y uno en la espalda.
En la tarde del mismo día fue visto otro cuerpo sin vida frente al cementerio, en el lugar conocido como El Remolino, cerca de Puerto Pizario.
Al día siguiente, 21 de enero, miembros de la Armada Nacional llegaron a la zona y recogieron los cuerpos.
Estos hechos han generado zozobra y temor entre los indígenas wounaan que habitan la zona, donde se libra una guerra entre el ELN y el Clan del Golfo (“Gaitanistas”).